Cuando nace un bebé, los padres y madres de familia se sumergen en un mar de información sobre métodos de crianza, alimentación o salud, que sobrepasan la demanda real de contenido.
En una época donde las personas suelen consultar todo en internet y redes sociales, los espacios para encontrar información confiable son pocos, de ahí la necesidad de crear sitios con expertos o madre a madre, donde compartir experiencias y consejos basados en datos reales.
De la A a la Teta surgió hace cinco años con la idea de apoyar de manera integral a aquellas madres que desearan establecer la lactancia materna, fundamentada en datos científicos y acompañamiento de especialistas.
Erika Loaiza, administradora del grupo en Facebook, recordó que este espacio inició con mamás de Colima, pero después se integraron mujeres de todo el país y últimamente de otros países.
“De pronto te encuentras que esa duda que tú creías absurda, la tienen tres mil mamás más que también pasaron por esa misma etapa.”
La mecánica del grupo es compartir madre a madre las experiencias de las diferentes etapas de la maternidad, el embarazo y la alimentación, mediante sugerencias que no caigan en la automedicación.
A cinco años de su creación, De la A a la Teta tiene más de tres mil miembros que integran “la tribu”, quienes comparten sus vivencias de manera respetuosa y sin juicios morales.
Para mantener el objetivo y la armonía del grupo se establecieron reglas de convivencia basadas en el respeto, acordes a la crianza respetuosa y en brazos, que se promueve aquí.
En este grupo se apoya la lactancia materna exclusiva, pero se respeta la lactancia mixta y el uso de fórmulas o sucedáneos de la leche. Como parte de las reglas de convivencia prohíbe la automedicación y la sugerencia de remedios para tratar cualquier padecimiento.
El acceso al grupo debe ser por invitación y las administradoras se reservan el derecho de admisión, pues revisan que los perfiles solicitantes sean personas reales y que utilicen sus redes sociales con cierto cuidado, debido al tipo de información íntima que se comparte.
De ahí que el grupo esté conformado por madres (mujeres) y sólo se haya admitido a un par de hombres por tratarse de médicos, pediatras, especialistas o casos específicos donde la madre comparte cuenta de Facebook con un hombre (pareja, padre, primo, amigo).
La administradora mencionó que ahora, debido al alcance que ha tenido el grupo, este funciona de manera automática, sólo se vigila que las integrantes respeten las reglas, no promocionen sus servicios, vendan o se rompan los códigos de seguridad.
Cada vez es más común encontrar grupos en Facebook donde se enseña a criar en comunidad y respetando las formas de cada quien.
Estos espacios de contención ayudan a calmar las ansias de madres primerisas que son bombardeadas con información tan variada y contradictoria entre sí, además de ofrecer un espacio de empatía y desahogo.
Y tú, ¿ya tienes tu tribu?
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