La COVID-19 ha resquebrajado la armonía espacio-temporal y numerosos sitios que deberían considerarse seguros se han vuelto alertas rojas, principalmente para las mujeres, como el transporte público al medio día, una plaza central en la mañana, o el mismo hogar en que nos confinamos, afirmó la coordinadora de Humanidades de la UNAM, Guadalupe Valencia García.
Al inaugurar de manera remota el IV Congreso Internacional sobre Género y Espacio, en presencia del rector Enrique Graue Wiechers, dijo: en este encuentro, que reúne a ponentes de diversas partes del mundo, se abordará el espacio, entendido no solo como calles, plazas o comunas rurales, sino también como “los cuerpos de las mujeres que salen a luchar por sus derechos y en búsqueda de la igualdad”.
El evento, que concluirá el próximo 23 de abril, también busca fortalecer la red de investigación sobre género, y generar recomendaciones de política pública, política universitaria y nuevas sensibilidades sociales, “para que los espacios no sean más armas en contra de las mujeres”, insistió la funcionaria universitaria.
La relación espacio-género, la violencia que se ejerce contra ellas, así como la discriminación hacia la diversidad se han problematizado desde hace décadas en el mundo; sin embargo, en la segunda década del siglo XXI aún hay grandes rezagos, especialmente en Latinoamérica, agregó.
Con ella coincidió la rectora de la Universidad Veracruzana, Sara Ladrón de Guevara, quien expuso que la pandemia por la COVID-19 ha generado un golpe físico y anímico, trastocado el mundo en que vivíamos e incrementado la violencia de género en espacios laborales y domésticos.
“No obstante las restricciones a la movilidad, el cese de actividades y la suspensión de labores presenciales, la violencia de género no se detiene ni los feminicidios o las agresiones físicas, verbales y sexuales; la violencia en los hogares ha alcanzado niveles, muy lamentablemente, históricos” insistió.
A octubre de 2020 se registraron en el país aproximadamente 200 mil llamadas de emergencia por denuncias de abuso sexual, acoso y hostigamiento, violación y agresiones de cualquier tipo.
“Estoy segura que uno de los objetivos centrales de este Congreso es reivindicar el derecho que las mujeres tenemos a una vida libre de violencia, lo mismo en México que en cualquier otra parte del mundo, en el que una mujer, una solo mujer, aspire a vivir su vida con plenitud y entereza, tanto en el espacio privado como en el público”, remarcó la rectora.
El director del Programa Universitario de Estudios sobre la Ciudad (PUEC), Javier Delgado Campos, indicó que el eje central del encuentro es el análisis de la nueva normalidad y el incremento de la violencia de género.
Informó que se tienen registrados 204 ponentes de América Latina y Europa y más de dos mil 600 personas interesadas en el evento organizado por el PUEC, en coordinación con el Centro de Investigaciones y Estudios de Género, las facultades de Arquitectura, de Filosofía y Letras, y el Instituto de Geografía de la UNAM.
También con la unidad Iztapalapa de la Universidad Autónoma Metropolitana, la Universidad Autónoma del Estado de México, el Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales, la Facultad de Economía y el Centro de Estudios de Género de la Universidad Veracruzana.