En el mundo del fútbol, el valor de un jugador se mide según distintas varas y sensaciones. En primer lugar está el rendimiento constante del individuo, que aunque se dedique a un deporte de equipo siempre tiene que demostrar su valor a nivel personal.
Pero no se habla solo de esto, dado que en el fútbol moderno el futbolista es también un producto del mercado y del circo en el que se ha convertido este deporte tan popular pero a la vez tan comercial. El caso de Cristiano Ronaldo es sin duda el más explicativo de cómo el fútbol sea ya un negocio absoluto.
El campeón portugués, que ha pasado del Real Madrid a la Juventus en el verano pasado, es famoso por haber cosechado muchos récords con la camiseta blanca, entre los cuales destacan los 61 goles en 54 partidos durante la temporada 2014-15. Su carácter ganador y sus cualidades futbolísticas, además de su mentalidad trabajadora, han hecho que se luciera durante años. Y no es un caso que en los últimos tres años el luso haya sido el máximo anotador de la Champions League, la competición más prestigiosa de todas, que ha ganado en dichas ocasiones con el Real Madrid. Su perseverancia de cara al gol y su dedicación a cuidarse lo están haciendo durar a altos niveles mucho más de lo esperado, aunque su aventura en la Juve todavía no acaba de despegar. Sin embargo, su rendimiento y su figura lo han elevado al nivel de uno de los deportistas más pagados y más emblemáticos de todo el planeta, llegando a competir con los jugadores de baloncesto de la NBA y otros deportes en los que se gana más que en el balompié.
De hecho, según las últimas listas publicadas por Forbes, la revista norteamericana especializada en economía, Ronaldo es el tercer deportista más pagado del mundo. Sus ingresos totales son de 108 millones de dólares , es decir tres menos que se eterno rival Lionel Messi. En el primer peldaño del podio, sin embargo, se encuentra el boxeador Floyd Mayweather, que el año pasado ha ganado nada más y nada menos que 275 millones de dólares. En general, entonces, está claro que el valor del futbolista en sí sea muy importante para conseguir el mejor salario, pero la figura de Cristiano va más allá del fútbol y varias son las empresas que lo han contratado como hombre imagen. Entre ellas destacan EA Sports, Clear Shampoo, HerbaLife, PokerStars, Samsung, TAG Heuer y Toyota, todas multinacionales que hacen hincapié en figuras relevantes.
Lo que también es cierto es que Cristiano es el futbolista más mediático y más seguido en las redes sociales, como demuestran los casi 330 millones de seguidores repartidos de la siguiente manera: 134 millones en Instagram, 122 millones en Facebook y 74 millones en Twitter. Es decir que el luso no solamente es un crack del fútbol mundial sino que también presenta números impresionantes en cuanto a los beneficios de su imagen.