Los fiscales italianos en Nápoles abrieron una investigación criminal después del suicidio de una mujer de 31 años de edad que luchó infructuosamente para retirar de internet un video que la mostraba teniendo relaciones sexuales.
El fiscal general Francesco Greco dijo el viernes que la investigación podría arrojar cargos de instigación al suicidio. Agregó que el caso estaba siendo coordinado con otro que se basó en una denuncia por difamación que la mujer interpuso contra cuatro individuos en octubre.
La queja seguía abierta cuando la mujer se suicidó el martes.
Según informes de prensa, la mujer envió el video a un pequeño grupo de personas, pero en privado. Sin embargo, el video se filtró y se viralizó rápidamente, lo que convirtió a la mujer en blanco de insultos y chistes.
Los intentos de la mujer de retirar el video de varias plataformas fracasaron.