Las agencias de inteligencia de Gran Bretaña no están haciendo lo suficiente para reclutar y promover a mujeres espías, de acuerdo con legisladores británicos.
Un reporte sobre las mujeres en los servicios de inteligencia destaca que el personal femenino es obstaculizado por una capa de jefes de rango medio, que tienen «una mentalidad masculina muy tradicional».
El reporte publicado el jueves por la Comisión de Inteligencia y Seguridad del Parlamento dice que las mujeres constituyen el 37% de la fuerza laboral en la agencia de espionaje interno MI5, la del exterior MI6 y el centro de espionaje electrónico GCHQ. Sin embargo, ocupan sólo 19% de los puestos gerenciales.
Los legisladores dicen que las agencias deberían hacer más esfuerzos para reclutar a mujeres de edad mediana y a madres, que tienen «una valiosa experiencia vital». El informe señala que agencias donde el personal «está cortado con la misma tijera» llevan a prejuicios inadvertidos que dañan el trabajo de espionaje.
Sugirieron que las agencias traten de atraer a mujeres con hijos a través del popular foro en internet para mamás, Mumset.
El reporte expresó además preocupación por que las mujeres con hijos son marginadas a papeles en recursos humanos o finanzas, en lugar de dirigir estaciones en el exterior o reunirse con agentes en el terreno.
Las agencias británicas de inteligencia han sido dominadas tradicionalmente por hombres y su imagen pública forjada por las descripciones en las novelas de John Le Carre y las películas y novelas de James Bond.
Pero esas organizaciones han estado reformándose discretamente desde hace años, al tiempo que han presentado un mayor perfil público. Stella Rimington se convirtió en 1992 en la mujer en dirigir el MI5, tres años antes de que Judi Dench interpretara por primera vez el papel de M, la jefa de James Bond. Campañas recientes han promovido a los servicios de espionaje como ambientes acogedores para mujeres y gays.