Usted habrá oído hablar de este nuevo tratamiento estético, pues está de moda por sus asombrosos resultados. La Carboxiterapia consiste en el uso del Anhídrido Carbónico (CO2) con fines terapéuticos, aplicado por vía subcutánea, es una técnica conocida hace ya muchos años. En la actualidad, la carbo, como se la conoce, es una de las mejores terapias para combatir la celulitis, el exceso de grasa en el cuerpo, la flacidez y el envejecimiento corporal y facial.
¿Cuál es el efecto de la Carboxiterapia?
Produce un potente efecto vasodilatador a nivel de la micro circulación de arteriolas y capilares, con aumento de la velocidad y movimiento de la sangre, y aumento de la presión parcial de oxígeno en los tejidos cercanos, lo que produce una mejoría en el aspecto y funcionamiento de los diferentes tejidos.
En cuanto a la celulitis, después de algunas sesiones se aprecia una piel más tersa, con más vida y brillo, a medida que se realizan las sesiones se van suavizando las irregularidades o piel de naranja, y se va perdiendo volumen.
En nuestra clínica combinamos la carboxiterapia con otras técnicas anticelulíticas como: mesoterapia, gimnasia pasiva, drenaje linfático manual.
¿Cómo se aplica la Carboxiterapia?
El CO2 se infiltra por vía subcutánea con una aguja esterilizada similar a la que se usa para aplicar insulina, conectada a un tubo muy delgado, que a su vez se conecta a un equipo especialmente preparado para este fin.
En Medicina Estética disponemos de un equipo capaz de distribuir el CO2 de manera controlada (dosis y tiempos de distribución del gas). Dicho equipo se controla mediante un microprocesador que regula todas las variables para conseguir un tratamiento efectivo y seguro.
Este tratamiento no debe aplicarse en pacientes con cáncer, EPOC descompensado, IAM, angina inestable, ICC, , infección localizada, epilepsia, embarazo, insuficiencia renal aguda y crónica, insuficiencia respiratoria, acidosis metabólica y acidosis respiratoria.