Pilar Serrano | AFmedios
[dropcap] 1 [/dropcap] Ten pensamientos de paz, valor, salud y esperanza, porque tu vida es obra de tus pensamientos.
Tus pensamientos construyen tu vida, por lo que tienes que tener tú el control de tu mente.
Comienza tu día con pensamientos positivos, como indica el Dalai Lama:
“Cada día al levantarte, puedes desarrollar una sincera motivación positiva al pensar: Viviré este día de forma positiva. No desperdiciaré este día.”
[dropcap] 2 [/dropcap] No trates nunca de pagar a tus enemigos con la misma moneda, ya que si lo haces, será más grande el daño que te harás a ti mismo.
[dropcap] 3 [/dropcap] En lugar de preocuparte por recibir la gratitud de lo que hace; no la esperes.
Recuerda que el único modo de ser feliz es dar por el sólo placer de dar.
Como decía Confucio: “Exígete mucho a ti mismo y espera poco de los demás. Así te ahorrarás disgustos.”
[dropcap] 4 [/dropcap] Cuenta tus bienes, no tus males.
Sé más consciente de lo mucho que tienes. Dale valor, disfrútalo, sonríe y siéntete afortunado. Conviértete en un localizador de beneficios. Como dice Orison Swett Marden “Adopta la divisa del reloj de sol: yo no marco sino las horas soleadas”.
[dropcap] 5 [/dropcap] No imites a los demás, se tu mismo; porque “la envidia es ignorancia” y “la imitación es suicidio.
“Nadie es superior, nadie es inferior, ni nadie es igual tampoco. Cada uno es único. Cada uno es una única manifestación. Así que deberíamos destruir toda idea de superioridad, inferioridad o igualdad y remplazarla por una nueva idea de unicidad. Solamente mira con amor y verás que cada individuo tiene algo que nadie más posee.” (Osho)
[dropcap] 6 [/dropcap] Cuando el destino nos entregue un limón, tratemos de hacer limonada.
Todos pasamos por situaciones complicadas en la vida, a todos se nos dan “limones” ¿Qué haremos con ellos? “No podemos cambiar las cartas que se nos reparten, pero sí cómo jugamos nuestra mano.” (Randy Pausch).
[dropcap] 7 [/dropcap] Olvida tu propia felicidad tratando de crearla para los demás.
Cuando eres bueno para los demás, eres mejor para ti mismo.
“No debemos permitir que alguien se aleje de nuestra presencia sin sentirse mejor y más feliz.” (Madre Teresa de Calcuta).